Adaptarse a un nuevo año escolar puede ser un proceso desafiante para niños, adolescentes y sus familias. Tanto si se trata de un cambio de curso como de un nuevo colegio, la transición puede generar inseguridades, emociones encontradas y muchas preguntas.
CÓMO ACOMPAÑAR DESDE CASA CON EMPATÍA Y RUTINAS EN LA VUELTA AL COLE
El comienzo de un nuevo curso representa una oportunidad para crecer, pero también implica salir de la zona de confort. Para muchos estudiantes, adaptarse a un nuevo entorno escolar supone enfrentarse a profesores desconocidos, nuevos compañeros y una organización diferente. A veces, la vuelta al cole va acompañado de nervios, tristeza o rechazo inicial.

El papel de las familias es clave, por eso creemos que estas recomendaciones pueden ayudar:
- Escucha activa: valida sus emociones y crea un espacio de confianza donde puedan expresar lo que sienten.
- Anticipación positiva: hablad sobre lo que pueden esperar del nuevo curso o centro.
- Retomar la rutina de manera gradual: establecer horarios regulares para dormir, comer y estudiar para ayudar a reducir el estrés.
- Modelar con el ejemplo: mostrar una actitud optimista y segura influye directamente en su percepción del cambio.
VUELTA AL COLE: ACTIVIDADES Y CONSEJOS PARA INTEGRARSE MEJOR EN EL AULA (Y DISFRUTARLO)
La adaptación escolar no solo se construye en casa, también se fortalece día a día en el aula. La escuela tiene un papel fundamental en facilitar la inclusión de nuevos estudiantes. Dinámicas grupales, juegos cooperativos o tutorías entre iguales pueden marcar la diferencia.
Desde Casvi Boadilla, fomentamos metodologías activas y participativas que favorecen la integración. Algunas estrategias efectivas para favorecer la integración:
- Actividades para romper el hielo: juegos de presentación en el aula y trabajos grupales.
- Mentorías: emparejar a los nuevos alumnos con compañeros que ya conocen el entorno ayuda a resolver dudas e integrarse más rápido.
- Espacios de escucha: las asambleas o tutorías permiten hablar de cómo se sienten y fortalecer el grupo.
EL PAPEL DE LA COMUNIDAD EDUCATIVA Y EL ACOMPAÑAMIENTO EMOCIONAL EN LA VUELTA AL COLE
No solo importa lo que sucede dentro del aula. Una escuela que cuida la inclusión, el bienestar emocional y las relaciones saludables en todos sus niveles (profesorado, familias, personal no docente) crea un entorno seguro donde los alumnos pueden desarrollarse sin miedo.
En nuestro centro, apostamos por proyectos donde trabajamos valores, resolución de conflictos y habilidades sociales. Estos espacios de acompañamiento refuerzan la autoestima, el sentido de pertenencia y la motivación a la hora de vivir la vuelta al cole.

CONSEJOS PARA HACER AMIGOS Y FORTALECER VÍNCULOS DESDE EL PRIMER DÍA DE LA VUELTA AL COLE
Hacer nuevos amigos es una de las principales preocupaciones cuando se cambia de clase o de colegio. Algunas ideas para ayudar en este aspecto:
1- Practicar habilidades sociales desde casa: el ensayo es parte del aprendizaje
Una de las mejores formas de ayudar a los niños y niñas a sentirse seguros en su nuevo entorno es que practiquen en casa algunas habilidades sociales básicas. A menudo damos por hecho que los menores “saben” cómo actuar en ciertas situaciones sociales, pero lo cierto es que muchas veces necesitan observar, repetir y recibir orientación antes de sentirse cómodos.
Puedes ensayar con ellos escenas cotidianas como:
- Cómo saludar al llegar a clase.
- Cómo pedir ayuda si no entienden algo.
- Cómo invitar a jugar o a sentarse con alguien en el recreo o en clase.
El objetivo no es que actúen “perfectamente”, sino que se familiaricen con situaciones nuevas y ganen soltura a la hora de socializar.
2- Actividades extraescolares: un espacio seguro para crear lazos nuevos
Cuando un estudiante llega a un entorno nuevo, a veces le cuesta integrarse en los grupos ya formados. Las actividades extraescolares pueden ser una vía muy eficaz para conectar con otros compañeros y compañeras desde un interés común.
Estas actividades generan una sensación de pertenencia más rápida: formar parte de un grupo pequeño con un objetivo compartido favorece el vínculo. A veces lo que puede parecer una simple extraescolar de dibujo, de fútbol o de baile se convierte en el lugar donde florece la confianza.
3- Fomentar la empatía: imaginar cómo se siente el otro
Una herramienta poderosa para mejorar la adaptación social es enseñar empatía. Ayudar a niños y adolescentes a ponerse en el lugar de los demás les permite interpretar mejor las situaciones y actuar con más sensibilidad y respeto. Esto es clave para hacer amistades, evitar conflictos y resolver malentendidos.
La empatía también ayuda a interpretar correctamente señales sociales. Por ejemplo, un niño empático puede identificar que alguien está triste, aunque no lo diga, y ofrecerle compañía, lo que fortalece los lazos y refuerza la autoestima de ambos.
Recuerda que con la vuelta al cole o la adaptación a un nuevo entorno escolar no ocurre de un día para otro, pero con apoyo desde casa y espacios seguros para expresarse, el proceso puede ser mucho más fluido. Acompañar, escuchar y dar herramientas concretas es clave.
Este curso puede ser el comienzo de una etapa maravillosa. Si quieres saber más sobre nuestros proyectos para hacer del colegio un entorno seguro visita nuestra sección de oferta educativa.